El restaurante de Castelló de la Plana ya estaba recomendado por la
prestigiosa guía roja, que en su edición 2026 lo eleva de categoría,
para reconocer “una cocina excepcional a un precio excelente”.
● Pedro Salas, en la cocina, y Beatriz Villalba, en la sala, se encuentran al
frente de este genuino proyecto, que reivindica el recetario propio de
la provincia, desde un espacio icónico del casco antiguo.
El restaurante Arre, ubicado en pleno corazón de
Castelló de la Plana, entra en la categoría Bib Gourmand de la Guía Michelin 2026, que
reconoce a aquellos establecimientos con “una cocina excepcional a precio excelente”.
Lo hace tras haber sido incluido en el apartado de establecimientos recomendados el
pasado mes de junio, desde donde salta a la nueva clasificación. “Arre era una idea en la
que creíamos con fuerza. Nos costó mucho hacerla realidad, pero gracias a la garra de
todo un equipo que creyó en nosotros, hemos llegado donde estamos y no podemos
estar más orgullosos”, manifestaba Beatriz Villalba, quien está al frente de la sala y es
propietaria del establecimiento junto a Pedro Salas, chef del restaurante. En una edición
de la publicación especialmente generosa con la provincia de Castelló, que obtiene dos
nuevas Estrellas, la pareja valora que haya calado el discurso de territorio, en el que Arre
lleva trabajando desde su origen, mediante la defensa de la despensa y el recetario local.
En total, España cuenta con 204 restaurantes Bib Gourmand, 29 de los cuales se sumaron
en la gala que tuvo lugar anoche, en el espacio Sohrlin de Málaga, para presentar la
nueva edición de la Guía Michelin España y Andorra 2026. En Castelló de la Plana, solo
hay tres restaurantes que presumen de este distintivo, en muchos casos predecesor de la
Estrella Michelin. Por ello, la incorporación de Arre supone un reconocimiento de primer
nivel al trabajo que, desde su apertura en 2022, se viene llevando a cabo en este genuino
restaurante, instalado en una antigua casa del siglo XIV en el caso antiguo de la ciudad.
Su entrada en Michelin, después de diferentes inspecciones, ya representó una validación
de su “excelencia, autenticidad y personalidad culinaria”, que ahora se ve reforzada por
el Bib Gourmand, donde se tiene muy en cuenta la accesibilidad de la propuesta. Un
aspecto que conecta directamente con la filosofía del chef y propietario, Pedro Salas,
quien explica: “Cuando abrimos Arre quisimos
crear un restaurante donde se comiese muy bien,
pero que no fuese elitista. Por eso, este
reconocimiento es el que mejor representa nuestra
f
ilosofía y nuestra forma de entender la cocina”.
La guía describe a Arre así: “Está en pleno centro,
instalado en un local de ambiente rústico no exento
de historia; de hecho, dicen que es el edificio civil
más antiguo de la ciudad, con grandes arcos que
pertenecieron a la antigua muralla y un horno (ya
solo decorativo) que data del s. XIV. El
chef-propietario, Pedro Salas, nos invita a descubrir
los sabores de esta tierra desde una perspectiva
actual. La propuesta se centra en varios menús:
Ronda nocturna (platos para compartir), Senda (la
opción más tradicional, pudiendo elegir entre su
Arroz al horno o una Torrà terminada en la mesa,
que tiene una plancha con ascuas en el centro), Vía Verde (vegetariano), Ramal (más
gastronómico) y Vía Augusta (un viaje culinario entre el mar y la montaña). ¡Suelen regalar
un librito con leyendas locales al finalizar!”.
Un restaurante que nace del territorio, y vuelve a él
Arre está ubicado en un espacio histórico singular: el antiguo Forn del Canyaret,
documentado alrededor del año 1300. Este horno gótico, con paredes de piedra, los
arcos ojivales y la bodega excavada en la roca, representa un espacio que sirve de base
para el relato gastronómico del restaurante. De alguna forma, su cocina recupera la
esencia del fuego que ya habitó este lugar durante siglos, trabajando producto local en la
parrilla y dando protagonismo a los mercados, la huerta, el mar y los obradores.
El proyecto comenzó a gestarse en 2020, durante la pandemia, como sueño compartido
entre Bea y Pedro: ambos miembros de la pareja querían crear un restaurante que
representase la gastronomía castellonense desde el respeto al recetario tradicional, pero
incorporando la mirada contemporánea y algunos guiños a sus numerosos viajes. A todo
ello, se suma la relevancia de la brasa, pues en el centro de las mesas de Arre hay una
parrilla para uso del comensal. Tras una restauración minuciosa del espacio, el restaurante
abrió sus puertas en 2022 y, desde entonces, se ha consolidado como una referente de la
ciudad, que atrae a numerosos visitantes de la provincia y del resto de España.
La oferta gastronómica de Arre se articula a través de varios menús degustación que
giran en torno a cuatro ejes principales: la tierra, el mar, los mercados y los obradores.
Cada uno de ellos dibuja un recorrido diferente por el territorio y pueden acompañarse
con un maridaje cuidadosamente seleccionado, a base de vinos de productores locales:
● Menú Senda, la puerta de entrada al universo Arre con platos icónicos.
● Menú Vía Verde, una propuesta vegetariana creativa y elaborada con mimo.
● Menú Ramal, marcado por el mercado y sabores menos convencionales.
Menú Vía Augusta, el más ambicioso, con siete pases para la experiencia total.
Los más largos, como desvela Michelin, se acompañan de la entrega de un libro de
leyendas para el comensal, reivindicando una vez más las raíces. Por eso mismo, la
llegada de la Bib Gourmand no solo supone una celebración para el equipo de Arre, sino
también para la ciudad de Castelló, que sigue afianzándose como destino gastronómico
de referencia dentro de la Comunitat. Asimismo, refuerza la apuesta de la provincia por
proyectos sólidos, honestos, con raíces y con una visión contemporánea del recetario
local. Arre reivindica, una vez más, que la cocina castellonense tiene mucho que contar, y
que puede hacerlo desde la autenticidad, la técnica y el respeto por el territorio.
MÁS SOBRE ARRE:
● Web: https://www.arrerestaurant.com
● Instagram: https://www.instagram.com/arre.restaurant/
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