LA CHICA DEL ZODIACO, una historia fresca, desenfadada y divertida de Andrea Izquierdo

Editoria Planeta. 352 páginas

Rústica sin solapas: 17,90€ Electrónico: 7,99€

Andrea Izquierdo construye en LA CHIZA DEL ZODIACO una historia fresca, desenfadada y divertida. Con unos personajes y trama adictivos, el lector no podrá evitar sentirse trasportado a la cálida Los Ángeles y rendirse a su energía sexy e irreverente. La primera entrega de la trilogía desborda diversión sin huir de la introspección. Y es que sus humanos personajes se divierten, pero también se ven abocados a enfrentarse a retos tan reales como lo son el desamor, la pérdida y la indecisión con un carisma contagioso.

No podremos evitar que Anna nos conquiste sin remedio a medida que la acompañamos en un viaje de autodescubrimiento que irá mucho más allá de Los Ángeles. Tierna y tímida, pero decidida y valiente, la joven valenciana cobra vida y escapa de las páginas para arrastrarnos de la mano en su a ratos irreverente, a ratos conmovedora aventura de autodescubrimiento sexual y emocional.

La nueva trilogía chick lit de Andrea Izquierdo para mujeres inconformistas con la valentía de juzgar el mundo en el que viven

¿Dejarás que el horóscopo rija tu destino o te atreverás a enfrentarte a él?

El chico libra es extrovertido e indeciso.

El chico escorpio es misterioso y sexual.

El chico sagitario es divertido e imprevisible.

El chico capricornio es ambicioso y responsable.

ANNA ESTÁ EN EL ALTAR

Va a casarse con el hombre de sus sueños…, o eso parece, porque se da cuenta de que no es el futuro que ella quiere. Decide huir de su familia y encontrarse a sí misma.

ANNA TIENE DUDAS

De fiesta con sus amigas, descubre que su ex, Carlos, parece haber pasado página demasiado rápido. Una de su grupo va de lista y le dice que es normal, que «es lo que pasa cuando eres aries y te vas con un libra».

ANNA ESTÁ HARTA

Tomará por fin las riendas de su vida con un experimento único: doce meses, doce signos, doce chicos.

Es hora de demostrar que el zodiaco es un invento estúpido y el amor no depende de las constelaciones.

¿O sí?

El indeciso libra

«En cuanto apoyo el zapato de tacón blanco en el suelo de la iglesia, soy consciente de que, cuando salga de ahí, mi vida nunca será la misma.»

Anna por fin siente que cumple con lo que se espera de ella: está a punto de casarse con Carlos, su formal y encantador novio al que su exigente madre adora. Pero a la hora de recitar los votos, la joven traductora freelance se siente paralizada… Y es que no puede quitarse de la cabeza la situación comprometedora en la que sorprendió a Carlos y su amiga Valeria hace unas pocas semanas. Para gran confusión de todos los asistentes, cancela el enlace, dejando a su prometido en el altar.

Tras unos días encerrada en casa de sus padres, su amiga Lucía interrumpe el maratón de películas de Marvel en el que se vuelca para convencerla de que contacte a Carlos y salga con sus amigas. Dudosa, Anna sigue su consejo, pero la noche tiene un final amargo cuando le hacen saber que Carlos ha estado saliendo con otras mujeres desde el momento en que se canceló la boda, y su ánimo empeora todavía más cuando el despecho de su amiga Valeria confirma sus sospechas. Celosa, le echa en cara que su relación estuvo condenada desde el principio debido a la incompatibilidad de su signo, aries, con el de Carlos, libra.

Indignada ante sus palabras, Anna decide demostrar que no representan más que tonterías. Pero una breve búsqueda parece confirmar que los vaticinios del horóscopo encajan con su situación amorosa. Es entonces cuando tiene una epifanía y se le ocurre la manera perfecta para encontrarse a sí misma y dejar a Valeria con la palabra en la boca:

«De pronto, todo cobra sentido en mi cabeza y las piezas del puzle encajan por fin.

Doce signos del Zodiaco.

Doce meses.

Doce hombres distintos.

Una oportunidad para cambiar mi vida, conocerme a mí misma y, sobre todo, demostrar que el amor no tiene nada que ver con las malditas constelaciones.»

Anna está decidida: va a probar suerte, y para ello emprenderá un breve viaje. Se decide por la divertida Ámsterdam, pero un problema con su equipaje causará que pierda el vuelo. Para su sorpresa, su hermano Raül, con el que mantiene una relación distante desde que alcanzara el éxito como productor musical en Los Ángeles, le paga un vuelo a la ciudad californiana y la invita a quedarse un tiempo en su casa.

La joven es consciente de lo mucho que desconoce de la vida de su hermano, pero no da crédito cuando descubre que vive en una impresionante mansión con su amigo, el atractivo y sarcástico Connor, entrenador de voleibol con el que choca desde el principio. Por suerte, su conexión con los demás miembros de la pandilla de Raül fluirá de forma más fácil: antes de darse cuenta ya habrá sido conquistada por la dulce amante de los animales Julia, la altiva Olivia y el divertido Harry. Animada por ellos y decidida a poner en marcha el experimento, se acuesta con Jakob, un chico libra con el que no tiene química.

Agobiada por haberse dejado llevar tan deprisa, interrumpe el encuentro y vuelve a la casa de su hermano, a donde va a buscarla su ex prometido Carlos en un intento de reanudar la relación. Anna acepta acompañarle a Hawái en el que iba a ser su viaje de luna de miel, pero un breve vistazo a los billetes y a su historial de WhatsApp desvelan que Carlos está decidido a llevarse a Valeria con él si lo rechaza. Desengañada, Anna pone punto final a su noviazgo de forma definitiva.

El ardiente escorpio

Las nuevas amigas de Anna se entusiasman cuando les desvela su nuevo experimento, que está documentando en un cuaderno que titula La Chica del Zodiaco. Insisten en participar a la hora de encontrar al representante del siguiente signo de la lista, escorpio.

«Sí, claro, esto es un trabajo de equipo. Anna nos necesita para guiarla dentro de la jungla de Tinder, y más del Tinder de Los Ángeles. Eso sí que es peligroso, mucho más que acercarte a las letras del cartel de Hollywood.»

La famosa aplicación de citas da resultado y la protagonista conoce a Theo, un misterioso, ardiente y carismático brasileño decidido a hacer realidad sus fantasías. La química entre ambos es eléctrica y su iniciación en el mundo del BDSM más que placentera, pero Anna sabe que no puede durar.

«Por eso sé, en ese preciso instante, que estoy segura de dos cosas.

La primera, cuando Theo me desata y enciende la luz, que el experimento está funcionando. Por fin.

La segunda, en cuanto miro al chico escorpio a los ojos, es que no puedo volver a quedar con él nunca más o me pillaré por él.»

El imprevisible sagitario

Decidida a olvidarse del sexy Theo, Anna acompaña a sus amigos al famoso parque de atracciones angelino Six Flags. Allí sorprende a Olivia y Connor dándose un beso a escondidas, un descubrimiento que le dejará un misterioso regusto de celos. Pero la excursión la ayudará a aclarar sus prioridades y, por encima de todo, la motivará a buscar a un chico sagitario, el próximo de la lista.

Para apoyarla, sus nuevos amigos organizan una fiesta a la que cada uno se compromete a llevar un amigo soltero del signo indicado. Tras algunas dudas, congenia con el divertido y musculoso Ali, con el que tiene una cita que acaba en desastre cuando se niega a usar preservativo, hecho que provoca que Anna interrumpa el encuentro.

El viaje a Valencia que realiza con su hermano para pasar las Navidades con su familia la ayuda a distraerse del fiasco, pero la tensión causada por la difícil relación que mantiene con su madre la empuja a volver a Los Ángeles antes de lo planeado.

El ambicioso capricornio

Tras una fiesta de Nochevieja sin nadie a quien besar, su amiga Julia la lleva a un bar exclusivo frecuentado por hombres de negocios, segura de que allí podrá encontrar a un responsable capricornio con facilidad. Y, efectivamente, conoce a Cameron, un elegante empresario que le ofrece trabajo como traductora. Una visita a su despacho se convertirá en mucho más cuando la introduce en los juegos de rol.

Anna se entrega a su despertar sexual con Cameron a pesar de la creciente preocupación que siente por su hermano Raül, al que cada vez ve más alterado. Pero el alocado fin de semana que comparte con su carismático jefe en Malibú se ve interrumpido cuando su padre le informa de que su madre ha sufrido un ictus que la mantiene hospitalizada. Angustiada, vuelve a su casa para recoger a Raül, al que encuentra totalmente ido por las drogas. Es Connor el que le cuenta la verdad:

«Tu hermano no solo está teniendo problemas con las drogas, sino con el dinero. Iré al grano, Anna: si no paga lo que debe en los próximos cuatro meses, le embargarán la casa y todos sus bienes. Se quedará en la calle.»

Afectada y sin saber lo que les espera en España, acepta la oferta de su amigo de acompañarlos en su viaje, dando fin a la primera parte de la trilogía La chica del Zodiaco.

Personajes magnéticos

La primera entrega de la trilogía La chica del Zodiaco desborda diversión sin huir de la introspección. Y es que sus humanos personajes se divierten, pero también se ven abocados a enfrentarse a retos tan reales como lo son el desamor, la pérdida y la indecisión con un carisma contagioso.

No podremos evitar que Anna nos conquiste sin remedio a medida que la acompañamos en un viaje de autodescubrimiento que irá mucho más allá de Los Ángeles. Tierna y tímida, pero decidida y valiente, la joven valenciana cobra vida y escapa de las páginas para arrastrarnos de la mano en su a ratos irreverente, a ratos conmovedora aventura de autodescubrimiento sexual y emocional. Haciendo honor a su signo aries, la protagonista de mechas arcoíris inspirará al lector a reunir el valor necesario para explorar, empezar a sentar los límites y enfrentarse a los retos que se necesitan para ser feliz y reivindicar el propio placer. Un ejercicio que solo se puede llevar a cabo con sinceridad ante uno mismo y buen humor.

«Por tu vida puede pasar cualquiera, pero si no te curas tú antes, nadie va a recomponerte ni a arreglarte. Es una tirita que solo te puedes poner tú misma»

Y los demás no son una excepción. Pese a ser fieles retratos de los signos que representan y que consisten el hilo conductor de la novela, los personajes de La chica del Zodiaco presentan matices, virtudes y defectos propios que los hacen únicos y magnéticos. La dulzura de Julia, la fiereza de Olivia, los seductores embajadores del horóscopo y el cariño torpe de Raül nos invitarán a explorar sus tramas y a enamorarnos de ellos. Y, para qué negarlo, a rendirnos a la intriga del misterioso, sarcástico y leal Connor, cuya química con Anna nos dejará ansiosos por leer las próximas entregas de esta excitante trilogía.

La ambientación impecable de la autora convierte a la fascinante Los Ángeles en un personaje más. Nos perderemos con los protagonistas por sus calles decoradas con estrellas de mármol, el pelo se nos rizará con la brisa salada de las playas de Malibú y Santa Mónica y el ritmo de sus alocadas noches se nos meterá en los huesos sin remedio.

Una historia fresca y divertida

Andrea Izquierdo construye una historia fresca, desenfadada y divertida. Con unos personajes y trama adictivos, el lector no podrá evitar sentirse trasportado a la cálida Los Ángeles y rendirse a su energía sexy e irreverente. Porque, como dice Anna, no hay nada mejor que dejarse llevar:

«Muchas veces se compara el amor con una montaña rusa, con sus subidas y sus bajadas. A mí, personalmente, me gustaría más asemejarlo a ese momento en el que está a punto de arrancar. Ese subidón con el que esperas a que pase de cero a cien, esos nervios de no saber en qué momento lo hará. Y, después, pasada la primera fase, dejarse llevar. Dejarse sorprender. Disfrutar de las caídas, de las remontadas y de todos los giros que se hacen en tan solo unos segundos.»

Sobre la autora

Andrea Izquierdo (Zaragoza, 1995) es escritora y emprendedora. Trabaja en el sector editorial desde hace ocho años. Ha publicado diez libros juveniles, entre los que destacan la saga Otoño en Londres y la trilogía Helen Parker. Estudió Derecho y Administración de Empresas en la Universidad de Zaragoza y está actualmente cursando el Máster de Edición en la Universidad Pompeu Fabra (Barcelona).

En 2020 cofundó Meikabuk, empresa de servicios editoriales para autores, y en 2021 cofundó LITERALI Box, empresa de cajas literarias y regalos para lectores.

En la actualidad trabaja en estas dos empresas, además de escribir, recomendar libros en Instagram y TikTok y dar charlas de fomento de la lectura.

La acompañan siempre un perro, un conejo y dos chinchillas.

Web: www.andreorowling.com

Instagram: @andreorowling

TikTok: @andreorowling